El tiempo. Los sucesos del pasado. Sucesos horrendos que bastan para hacerme llorar. Sucesos tan hermosos y perfectos que el hecho de que ya nunca volverán a pasar alcanzan para que las lágrimas desciendan por mi rostro. Sucesos, sucesos, sucedidos todos en un marco omnipresente, un tic tac constante, eso que solemos llamar tiempo.
No ghosts.
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