Not so long...

Es impresionante cómo en sólo unas palabras, todo vuelve a ser como el principio. Como cuando no te conocía, no sabía quién eras, así es como me siento ahora. No entendía tu forma de pensar, porque ni siquiera la sabía, y me caías mal por el simple hecho de que me observaras sin decir nada. Porque sí, sé que me observabas, me daba cuenta. Quizás esa vaya a ser la única diferencia de ahora en más: ya no me vas a observar. Porque sabés quién soy, en todas las situaciones. En las buenas y en las malas. Sabés cuánto puedo llegar a querer a alguien, o por lo menos yo intenté que lo supieras...
Verte y no tener idea de quién sos, porque aquello que yo conocí en su momento, ya no existe.